jueves, 27 de septiembre de 2012

Little Tokyo. ~

Las 16:51 del 13 de junio de 2012.
Me quedan apenas 2 días para regresar a España. Ahora mismo estoy sentada encima del futon de la habitación del hostal. Viendo pasar por la ventana los minutos junto a esos enormes cuervos que llevan cuidandome desde que llegué. No hay razón para irme, ni tampoco para quedarme.
``Sal, sal ahora mismo a rogar a los dioses que dejen quedarte.´´Los pájaros no dejan de ir de un lado a otro, pero a mi no me han creado como tal. No soy un pájaro y no dejo de limitar a mis alas. Somos diferentes, la evidencia es clara. Igualmente siento que encajo, que esta es mi naturaleza. Raramente brilla el sol como ahora, pero es tan hermoso que vale la pena esperar por ese rayo. Sin embargo aquí no hace falta esperar al sol para tener esperanza, ella ya corre sola por las calles. La observo en cada niño, cada madre, cada grupo de colegialas sonrientes, en cada anciana y borracho. En cada persona que se ofrece a ayudarte sin siquiera entenderte.¿Por qué no quedarme aquí para siempre?